Team Hoyt

Buena noche de reyes,

En esta noche mágica y especial os quiero hacer un regalo.

Un día de esta semana, estaba a punto de cerrar la radio cuando en el Tu Dirás de RAC1, un periodista de El Mundo Deportivo llamado David Llorens empezó a explicar una historia apasionante de un padre y un hijo, el Team Hoyt.

Os paso el link por si quereis leer toda la noticia, pero yo os haré un resumen.
http://www.elmundodeportivo.es/web/gen/20080104/noticia_53423599409.html

Rick Hoyt nació con el cordón umbilical enrollado a su cuello, eso le costó lesiones cerebrales irreversibles. Los médicos lo dejaron por un caso perdido. Su padre, un teniente coronel del Ejército del Aire americano, no aceptó la decisión médica. Al cabo de los anyos los padres de Rick observaron que éste reaccionaba a juegos de sus dos hermanos. La parálisis cerebral no era total. Llevó a Rick a un grupo de expertos universitarios que certificaron que Rick entendía, escuchaba y sentía. Le construyeron un ordenador a medida con el que empezó a comunicarse a sus 12 anyos. Lo primero que dijo: "Go Bruins", un grito de ánimo al equipo de hockey de su ciudad (Boston).

Dick, el padre, se dió cuenta inmediatamente que su hijo era un fan de los deportes. Al cabo de un tiempo Rick le pidió correr una carrera en beneficio de un companyero de clase que habría sufrido un accidente. A partir de ahí se han sucedido travesías, carreras, maratones (65), marchas, triatlones (216) y hasta 6 ironman. Las ironman son las triatlones más duras del mundo y consisten en 3.8 km nadando, 180 km en bicicleta y 42.195 km corriendo. Uno de mis suenyos.

Os preguntareis como Rick y Dick participan en estos eventos deportivos. Nadando Dick lleva atada a su pie una barquita con Rick dentro. Pedaleando Dick lleva a Rick en un sillín delante de la bicicleta. Corriendo Dick transporta a Rick en una especie de silla de ruedas. Yo tampoco me lo creía




Rick tiene 45 anyos. En una entrevista le preguntaron: "Si pudieras que te gustaría dar a tu padre?". Rick contestó: "Sería increible que por un momento mi padre se sentara en la silla y yo pudiera transportarle".

Espero que este post me inspire a quejarme menos, a luchar más y a creer que lo imposible es muchas veces posible. Os apuntais?

Besos

Jordi